MADRUGAR Y DESPERTARSE

Después de las vacaciones navideñas hay que retomar la marcha del trabajo o el estudio y seguro que a más de uno/a por la mañana "las sábanas se nos quedan pegadas en el cuerpo" y sobretodo con el frío que estamos pasando. Madrugar nos resulta una acción perezosa y muy esforzosa, por ello os voy a dar una serie de consejos con el fin de que el despertar sea un acto bonito, relajante y con humor.

Para empezar debemos desecharnos de aquellas melodías estridentes que nos ponen de mala leche por la mañana y reemplazarlo por la luz del día, a poder ser natural, pero si dormimos con la ventana bajada, es necesario hacerse con un reloj lumínico. con ello conseguiremos que nuestro cerebro reciba la señal de la luz y poco a poco se vaya despejando.

Segudamente debemos imitar a un gato, si, no es broma, debemos estirar hasta el último hueso de nuestro cuerpo en la cama hasta teminar con un gran bostezo.

Nos incorporaremos lentamente de la cama, nos daremos una ducha ligera, terminando con agua lo más fría posible y nos incorporaremos ya despejados a la mesa con un buen desayuno (primero beber un vaso de agua para limpiar nuestro estómago) complementando los cereales, leche y fruta.

Y ya estamos preparados para salir de casa. ¡Ah! no olvidar ponerse guapísima usando colores alegres para reflejar la alegría con la que nos levantamos o simplemente ponernos un poco de carmín rojo o fresa.